jueves, 18 de mayo de 2017

Piensos de perro, la verdad

Todos queremos alimentar a nuestras mascotas lo mejor posible, para su salud, longevidad y estado general, el alimento es una parte importante.
Es entonces cuando nos ponemos a estudiar las etiquetas de los sacos y, ¡no entendemos nada!
Haremos el intento de aclarar algunos términos. La ley obliga que los ingredientes aparezcan en los sacos según la cantidad de mayor a menor.
Teniendo en cuenta que los perros son carnívoros, el primer ingrediente debería de ser carne o pescado, las proteínas provenientes de carne y pescado son las optimas para ellos, las que mejor pueden asimilar.
La carne puede estar fresca o en harina. Puede ser de consumo humano o no poner nada de donde procede. Lo mejor es la carne de consumo humano o la harina de carne, si es harina de calidad o son plumas y cascos.
Normalmente después de la carne vienen los demás ingredientes, una etiqueta que lleva primero carne y luego 3 tipos de cereales y estos en varias presentaciones, por ejemplo maíz, copos de maíz, harina de maíz, deja seria dudas si sumando el porcentaje de todo eso que es cereal no estamos muy por encima de lo que lleva el pienso de carne.
Hay piensos sin cereales, que son de mucha más calidad que los que de relleno y sin que el perro pueda realmente aprovechar mucho, están llenos de cereales. Cereales que además aportan proteínas que el organismo del perro no puede utilizar. Los perros son carnívoros, no son gallinas.
El tercer lugar vienen los demás ingredientes que aportan fibra, importante en su justa medida (mas menos un 4%) para el tránsito intestinal. La fibra la dan al pienso ingredientes como las verduras y las frutas.
Además los piensos para perros llevan añadidos que aportan minerales y vitaminas. Cuanto más natural sean, mejor. Los piensos de calidad trabajan con aceites como el de salmón o aceites vegetales.
De todos los ingredientes se extrae la tabla de composición que nos indica proteínas, grasas, fibra, cenizas.
El contenido en proteínas, que es el primero, no lo podemos evaluar sin saber de donde provienen. Piensos altos en algunos cereales como la soja, guisantes, alfalfa, como ejemplo, serán altos en proteínas pero no en proteínas provenientes de carne que son las que nuestro perro necesita.
Las grasas son necesarias, un 70% en grasa de lo que tiene proteína es un buen equilibrio para un perro sin necesidades especiales de alimentación. Igual que en las proteínas los ingredientes, bien analizados nos dirán de donde provienen estas grasas, de la carne y de los aceites de calidad o de ingredientes de más baja calidad.
La fibra ya la hemos comentado alrededor de un 4 % es una buena medida. Piensos light tendrán un valor más alto, disminuyendo la capacidad de absorción de los alimentos.
Cenizas es lo que aparece en cuarto lugar de la etiqueta. Es el producto final de la combustión de los alimentos. En otras palabras, si se fuera a incinerar completamente una lata de comida para perros, los tres nutrientes principales (proteínas, grasas y carbohidratos) se queman, dejando sólo los minerales del alimento detrás. Y gran parte de esos minerales son el calcio y el fósforo. Aunque solo la cifra cenizas no nos dice de donde proviene. Lo normal en un pienso es hasta un 8% de cenizas

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